La combinación de psicofármacos y psicoterapia crea una espiral positiva: los fármacos alivian los síntomas agudos y mejoran la claridad y la motivación, lo que facilita el trabajo en terapia; la psicoterapia, a su vez, aborda las causas profundas, enseña las habilidades de afrontamiento y fortalece la adherencia, reduciendo así recaídas.
Psicofármacos: El tratamiento comienza con el diagnóstico . El Dr. Botella lleva mas de 40 años explorando los síntomas, estableciendo los diagnósticos y utilizando los tratamientos disponibles. Una vez conseguido la mejoría de los síntomas y de la regulación emocional, aumenta la fuerza necesaria para participación activa en la terapia.
Psicoterapia: modifica pensamientos y conductas disfuncionales, desarrolla herramientas de regulación emocional y previene recaídas. Este desarrollo de la capacidad de comprensión, de las habilidades de cambio y de la fuerza de la aceptación permite comenzar la reducción progresiva y la retirada de los fármacos necesarios en la primera fase del tratamiento.
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